
Aún cuando el sol brilla cada mañana en el horizonte,
en mi corazón, las nubes ocultan su brillo.
En el solitario y oscuro sendero,
mi alma busca la luz de la esperanza.
Mas, todo esfuerzo es inútil;
la soledad ha consumido todo.
El futuro incierto aguarda,
y las cenizas del pasado han sido llevadas por el viento.
Desesperación, es todo lo que siente mi alma.
Angustia y miedo, lo que siente mi corazón.
Pues aunque el sol brille cada mañana,
las nubes dentro de mí, nunca su brillo, me dejarán contemplar.